Dar plena vigencia a los derechos humanos, civiles y políticos de la sociedad sonorense. Son indivisibles las libertades individuales, los derechos políticos, económicos y sociales, y los derechos de las minorías, tanto políticas como étnicas, culturales o religiosas, además, lo garantizan nuestros principios a las libertades en las preferencias sexuales de los individuos. Los derechos de los discapacitados físicos quedarán asegurados promoviendo su integración a la sociedad, la aprobación de la ley para discapacitados que el PRD aprobó en la actual legislatura, cuenta con mecanismos de avanzada para la protección y promoción de varios de sus derechos; sin embargo, se propugnará porque en lo sucesivo se actualicen y enriquezcan sus postulados, así como se garanticen todos sus derechos ya establecidos. 

        En el organismo encargado de garantizar los derechos humanos, aun prevalecen lagunas en cuanto a sus facultades legales y se omite la defensa de temas sustanciales como el derecho laboral, los electorales y no admite la ingerencia en las fuerzas armadas. En este sentido, habrá que incorporar la pertinencia de su intervención en dichos aspectos que fundamento darle instrumentos jurídicos para que se puedan cumplir a cabalidad su recomendaciones, es decir, que se eleven al rango de cumplimiento obligatorio o existan sanciones. Además debe ser nombrada a propuesta de la sociedad misma, y nombrada por 2/3 partes del Congreso del Estado. 

        Las Organizaciones no gubernamentales y las asociaciones civiles y políticas, deben de tener el mayor respeto por parte del Estado, entendido este como los tres poderes que lo conforman y se deberán garantizar sus derechos constitucionales de libre manifestación y asociación. En este sentido, es importantísimo que las ONG'S, conserven su autonomía de intereses poco claros o que no obedezcan a los intereses generales de la población y las comunidades mismas. 

        En las comunidades indígenas, el gobierno no debe tener injerencia alguna y respetar fundamentalmente sus usos y costumbres, ancestralmente así se han regido, y por intereses políticos y económicos se han visto involucrados en disputas internas y división de sus autoridades tradicionales. El gobierno deberá garantizar sus derechos históricos y deberá promover apoyos económicos suficientes para elevar la calidad de vida de los mismos, que por cierto son de los sectores más atrasados. 

        Los campesinos y los trabajadores del campo se encuentran en estado de indefensión, en principio por la enorme y continua sequía que se ha presentado en los últimos años, lo que ha provocado el gran atraso en el que se encuentra dicho sector. El gobierno deberá impulsar un programa emergente y urgente de apoyos sustanciales, para reactivar la actividad productiva en el campo, y poder estar al menos en mejores condiciones para poder competir con la apertura comercial a la que ya están expuestos. El TLCAN, ha afectado sustancialmente a este sector, ya que la tecnología de punta de la industria norteamericana, sigue estando a una distancia enorme de la que actualmente utiliza el campo mexicano; en este sentido se debe replantear una profunda revisión de esta política y establecer nuevos esquemas de fomento a la mayor productividad del campo mexicano y en nuestro caso del campo sonorense. Al ser un gobierno emanado del PRD, se alentará de manera inmediata una Secretaría de Fomento al Campo Sonorense. 

        El sector ganadero también se encuentra en condiciones de extrema gravedad por las sequías que ha ocasionado la escasez de lluvias en el estado durante los últimos años, por lo que el gobierno deberá apuntalar apoyos emergentes para reactivar la actividad pecuaria en la entidad. 

        En lo que se refiere a los trabajadores de la industria, que en su mayoría se encuentra concentrada en la industria maquiladora o en empresas transnacionales; ya es sumamente común sólo ver empresas que son franquicias extranjeras. Si bien es innegable, dicha actividad productiva ha generado gran cantidad de empleos en nuestro estado. Es fundamental que el gobierno garantice el respeto irrestricto de las empresas transnacionales, a los derechos laborales de la clase trabajadora en el Estado de Sonora fundamentalmente el de las mujeres. 

        En cuanto a los jóvenes y las mujeres se refiere, el PRD promoverá una política integral para su cabal desarrollo y mejorar sustancialmente el nivel de vida de los mismos. Los derechos políticos de la mujer, así como la generación de empleos bien remunerados, será una característica primordial de un gobierno perredista. Los jóvenes, serán un factor importantísimo para el gobierno y serán reconocidas y respetadas su diversidad cultural de estilos de vida, formas de vestir y derechos políticos de sus sectores; la educación gratuita, laica y científica, será, sin lugar a dudas, la característica fundamental de impulso del gobierno emanado de nuestro instituto político. Para poder dar seguimiento puntual a dichas políticas y a la vez para que exista un espacio para la discusión y el consenso de dichos programas de gobierno, el PRD, impulsará desde el gobierno la creación de una Secretaria de Atención a la Juventud, que su principal característica sea el respeto a la pluralidad y se destinen los recursos suficientes para poder garantizar el funcionamiento de la misma. 

        Respecto a la Salud, el PRD replanteará de manera sustantiva el presupuesto que se destina a ella. Es inminente que en este aspecto el estado mexicano ponga especial atención y cumpla con una de sus funciones sustanciales en su obligación de ser los garantes de que la sociedad en su conjunto tenga acceso a una atención de calidad, oportuna y con eficiencia en materia de salud. 

        En los últimos años el gobierno a descuidado de manera muy lastimosa a este sector y se ha rezagado de un crecimiento poblacional que no ha sido capaz de controlar con políticas claras de planeación familiar; generando en el seguro social un monstruo burocrático, ineficiente y corrupto, que solo ha servido como trampolín para políticos, en vez de fomentar políticas integrales y de largo plazo que vengan a resolver los enormes rezagos que en materia de infraestructura y tecnología tienen los hospitales mexicanos. 

        El gobierno emanado del PRD, impulsará decididamente la canalización inmediata de mayores recursos para el sector salud, preservando el principio fundamental que tiene el Estado mexicano de otorgar servicios de salud eficientes y de calidad a la población en general; no renunciará a este derecho histórico e inalienable que tienen los mexicanos y frenará toda intención de los actuales gobiernos neoliberales, que su tendencia es a privatizar el sector salud y desatender así de una de sus responsabilidades prioritarias en su carácter de rector de la seguridad social de la población mexicana.